Central cayó por 3 a 0 ante Gimnasia y Tiro y no encuentra el rumbo. En otra actuación en donde no se pudo rescatar casi nada del equipo, son 7 los goles recibidos en las dos fechas disputadas y la impaciencia comienza a vislumbrarse.
Es difícil escribir sobre un plantel que en los dos torneos pasados tuvieron muy buenos rendimientos, pero la realidad indica que lo que se esperaba de ellos, hasta el momento, es una incógnita.
El baldaso que recibió el equipo ante Sportivo Belgrano hacía pensar que era un partido aparte, una sorpresa que no iba a incidir mucho en lo que venía. Pero ante Gimnasia, los errores se repitieron y hasta se agravaron. Se agravaron porque Central casi no tuvo chances netas de gol, porque el medio campo no generaba fútbol y no había orden, y porque la defensa estaba desorientada, sobrepasada en cada situación.
En la segunda etapa se acentuaron los errores, y hasta se podía observar a Piozzi resignado, sin respuestas. No hay dudas de que creemos que se puede mejorar, que hay material, pero deben ser conscientes, los jugadores, que jugando de esta manera, no se va a lograr nada.
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